El caso de plagio de tesis de Pena Nieto

  La Universidad Panamericana es y debe de ser la única institución que dé un veredicto sobre este tema, debe velar por su prestigio. Y la negli- gencia, el plagio de Peña Nieto, debe tener repercusiones. Algunos de los afectados por este hecho, y también estudiantes actuales de la

  Al igual que muchos egresados de su tiempo, Peña Nieto no tuvo la vi- sión de que su trabajo podría estar disponible más allá de la biblioteca central de su alma mater.

  LA INVESTIGACIÓN que anunció Carmen Aristegui y su equipo sobre la tesis de licenciatura que presentó Enrique Peña Neto arroja plagio, tal como se define esa palabra. Presentó como propio material ajeno. Este he- cho debe de tener repercusiones más allá del escándalo en los medios.

  Es un excelente trabajo de inves- tigación, el equipo de especialistas y académicos que lo desarrolló se tomó el tiempo necesario para llevarlo a cabo, y presentó los resultados que ya conocemos. Ojalá que el trabajo periodístico de Aristegui sea ejemplo para que otros periodistas en todo el país escrudiñen de manera similar a los políticos, sobre todo a los aspirantes a puestos públi- cos, y de esta manera ir de- purando a los corruptos de los honestos, que sí los hay.

  

Sergio J.

  Universidad Panamerica- na, piden que se le revo- que el grado. No creo que en este caso sea lo justo.

  VIERNES 26 de agosto de 2016 El caso de plagio de tesis de Peña Nieto, mi humilde opinión

Castro Becerra*

  • *El autor administra

    un sitio en internet

    dedicado a plagios

    de tesis.

  Peña Nieto egresó de la Universi- dad Panamericana en 1989 y se tituló en 1991. ¿Qué hizo en esos dos años? ¿A qué se dedicó Peña Nieto desde el momento que egresó al día en que presentó su tesis? No lo sé, pero como presentó su texto dos años después se puede deducir que se dedicó a elabo- rarla. Por lo tanto se puede decir que sí hizo un trabajo de investigación, como es requerido; y tal cual como lo menciona su asesor de tesis, el plagio fue por omisión, por deficientes hábi- tos de investigación, y por negligencia tanto de él como de Peña Nieto. son muy pocas las universidades pri- vadas que destacan en investigación científica.

  El reporte de Aristegui especifica que el plagio existe en por lo menos un 28.8 por ciento de la tesis de pre- sidente. También se indica que utilzó sin citar las obras de por lo menos 10 autores.

  Algunos egresados de educación superior de todos los nive- les se roban tesis, mismas que resul- taron en el otorgamiento de grado, ya presentadas en otras latitudes, y las presentan como propias. Tesis ente- ras. También hay quienes ensamblan una tesis de varias otras, también ya presentadas. La copia total es un caso muy grave, pues está ausente de todo esfuerzo y ética.

  En los mismos datos que presenta Aristegui se lee que el 71.2 por ciento del material es original, y que su investigación bibliográ- fica (que por lo general a eso se limitan las tesis de licenciatura) incluye por lo menos 10 libros. Es decir, Peña Nieto sí hizo una in- vestigación bibliográfica. Su pecado es no haber citado de manera correcta, lo cual sí constiyuye un plagio.

  Dudo que la intención en ese mo- mento haya sido la de plagiar, pues en sus tiempos los libros no estaban dis- ponibles en línea, y no se podía prac- ticar el copiar y pegar tan de manera tan sencilla como hoy.

  Durante el proceso de escritura de una tesis las universidades delegan al director de la misma el que los pro- cedimientos internos se cumplan. El asesor de Peña Nieto, el Dr. Eduardo Alfonso Guerrero Martínez, ha dirigi- do más de 193 textos, según encontró Aristegui. Habría que hacer un análi- sis de estos trabajos y ver qué tantas de ellas citan de manrea correcta.

  En opinión de quien esto escribe lo correcto es que la Universidad Panamericana exija una disculpa por parte del señor presidente y de su asesor de tesis, además de corre- gir la omisión. Peña Nieto tiene una gran responsabilidad en este mo- mento, y mientras sea presidente no debería de distraerse en corregir ese documento. Esperemos que la universidad, en caso de seguir ese camino, le otorgue una extensión

  Hay de plagios a plagios, y aunque no existe un catá- logo que los clasifique por gravedad, sí tenemos el cri- terio suficiente para poder diferenciarlos.

  

www.plagios.info

COLUMNA INVITADA