La relación entre migración y pobreza

resulta una justificación, antes se presenta para que los lectores puedan evaluar este trabajo en su justa dimensión.

3. La relación entre migración y pobreza

En ocasiones la migración genera más pobreza. En otras, la pobreza conlleva la migración. De igual manera también, la migración puede ser un fenómeno que contribuye al alivio de la pobreza. En otros términos, “la migración puede causar o ser causada por la pobreza”, puede empeorar los niveles de pobreza o aliviarlos. Tales situaciones probables varían de acuerdo al nivel de desarrollo de la región que se desea analizar Skeldon, 2002. En ciertas partes del mundo la gente pobre, entre ellos la mayoría de los indígenas en Latinoamérica, decide migrar como una fórmula para aliviar su estado de pobreza, de hecho en algunos casos así ocurre. Sin embargo, en otros la alternativa de migrar poco a poco va ampliando las condiciones de pobreza y afectando de forma perjudicial otros aspectos de la vida social, cultural y psicológica de las personas. En general, en la mayoría de los países periféricos o “en desarrollo” las migraciones ocurren desde zonas rurales, las cuales en su mayoría se encuentran subsumidas en la pobreza. Para el caso del fenómeno que presentamos aquí, sobre la migración emberá y wounaan a través de la frontera, en la región de Jaqué, no podemos desligarlo del alto grado de aislamiento y empobrecimiento al que son sometidas las comunidades que se encuentran en el río Jaqué y Pavarandó. Inclusive, aún cuando en algunos casos la causa principal para migrar sea el conflicto armado y la crisis humanitaria que existe en Colombia, ésta no puede separarse del trasfondo de exclusión social y empobrecimiento a la que es sometida gran parte de la población colombiana Danilo Suárez, 2003. Mucho menos cuando ha sido evidente que el territorio político- administrativo del departamento del Chocó, de donde provienen la mayoría de los migrantes emberá y wounaan, en casi todo el devenir histórico y cultural colombiano, constituye una región periférica de desarrollo económico y social. De hecho, parece estar sometida a las secuelas de la colonización interna por parte de otros departamentos circundantes Wade. Por su parte, en lo que se refiere a la definición de la pobreza, ocurre algo parecido con la definición sobre migración. Ambos han sido difíciles de definir y de medir. Como ya se ha podido notar, hemos asumido un tipo particular de definición de lo que es la migración. Ahora bien, a partir de las reflexiones del antropólogo español Francisco Checa 1995 se considera conveniente avanzar en algo similar para el caso de la definición de pobreza. Más que enfrascarnos en la medición de sus niveles, aceptamos que es: “un estado de diversos tipos de carencias de, al menos, alguna clase de bienes importantes para la vida social e individual. La pobreza es un estado de debilidad, de dependencia, de subordinación o humillación, respecto a la privación de medios para conseguir la subsistencia, pero una existencia humanamente digna; medios de todo tipo: económicos, sociales, de poder o saber, de salud, de honra, etc., aunque no han de faltar todas en la misma persona” Checa, 1995. Si bien la pobreza no deja de ser un criterio relativo, evidentemente distingue su relación con carencias, con necesidad, con diferencia en el acceso a bienes y servicios básicos. Carencias y necesidades que se distinguen respondiendo a un momento histórico, a una realidad particular y a una cultura determinada. Ahora bien, ser pobre no es una condición que incluye únicamente necesidades de bienes materiales, sino que también de otros tipos, como: de información y acceso a ella, de cualificación profesional, de educación y equilibrio personal y social Checa, 1995. Aspectos que muchas veces son negados y vedados porque las estructuras económicas, sociales y políticas que provocan y sustentan el empobrecimiento continúan intactas. Tal es lo que ocurre a escala mundial, la globalización de los medios de comunicación, la tecnología, la producción, los recursos y los bienes del planeta, no supone un igual acceso a dichos recursos. Todo lo contrario, aún continúa o aumenta la inequidad y las injusticias. Así no los comenta este antropólogo español: “Se globalizan a escala planetaria los medios de comunicación, la tecnología, la producción, los recursos y los bienes de la tierra, pero ¿quiénes y cuántos se benefician de este proceso globalizador? Debemos, pues reflexionar sobre la pobreza en el mundo, porque la globalización capitalista, a la vez que integra a nivel mundial la producción y el mercado, conlleva el incremento de la competencia entre los diversos sectores y países, Océano Pacífico Mar Caribe DARIÉN Coclé Veraguas Comarca Ngöbe-Buglé Chiriquí Bocas del Toro Los Santos Darién OCÉANO PACÍFICO MAR CARIBE COMARCAS Y PROVINCIAS DE PANAMÁ Comarca Ngöbe - Buglé. Ley Nº 10 del 7 de marzo de 1997. Comarca Kuna de Madunqandi. Ley N’ 24, del 12 de enero de 1996. Comarca de Kuna Yala. Ley Nº 16, del 19 de febrero de 1953. Comarca Kuna de Wargandi. Ley Nº 34 del 25 de julio de 2000. Comarca Emberá-Wounaan de Darién. Ley Nº de 22, del 8 de noviembre de 1983. COLOMBIA JAQUÉ TUIRA distancia más el Norte del Sur, y jerarquiza aún más la estructura desigual de la riqueza y del poder económico en manos de una docena de naciones del Primer Mundo” Calvo Buezas, 2004: 20-21. A nivel nacional, tales desigualdades son evidentes cuando se compara el acceso que tienen las regiones y territorios autónomos indígenas a la educación, la información, la tecnología, al transporte, la salud, la vivienda, al mercado y a la alimentación. En Panamá, las regiones más pobres continúan siendo las indígenas. De hecho, son los distintos pueblos indígenas los más pobres y excluidos de este país. MAPA Nº 1: División política y administrativa de la república de Panamá C C A A P P Í Í T T U U L L O O S S E E G G U U N N D D O O U U N N A A C C E E R R C C A A M M I I E E N N T T O O A A L L O O S S E E M M B B E E R R Á Á Y Y W W A A U U N N A A A A N N C C A A P P Í Í T T U U L L O O S S E E G G U U N N D D O O U U N N A A C C E E R R C C A A M M I I E E N N T T O O A A L L O O S S E E M M B B E E R R Á Á Y Y W W A A U U N N A A A A N N “Somos indios, sólo nada más porque nos vestimos, digamos, de vestido este sic ropa y los hombres el pantalón, digamos que la ropa… sólo ese sic es la diferencia porque anteriormente los varones usaban, digamos, el guayuco y también andaban así, lo mismo que nosotras las mujeres, sin nada de camisa, nada entonces” Mujer Emberá, 2005. Comúnmente para referirse a los emberá y los wounaan se ha utilizado el nombre chocó o chocóes. La antropóloga colombiana Patricia Vargas señala que en los ámbitos académicos “se ha planteado que este nombre se deriva de los cántaros para la chicha llamados chokó. Esta fue la primera denominación utilizada por los españoles. Algunos autores opinan que esta denominación se dio cuando los nativos ofrecieron sus cántaros para el comercio a los extranjeros” Vargas, 1993: 18. Tal denominación ha ido variando producto de los movimientos indigenistas e indígenas que empezaron a defender, desde los años cuarenta y enfatizándose en los setenta y ochenta del siglo XX, los derechos de autodeterminación de los pueblos indígenas. Además, es a partir de estudios lingüísticos y genéticos que se revela con mayor énfasis una diferenciación entre muchas poblaciones indígenas de Latinoamérica que antes eran reconocidas como un solo pueblo. Incluso, posterior a la creación de la Comarca Emberá-Wounaan 1983 se empieza a hacer una distinción entre ambos pueblos dentro de las instituciones sociales, políticas y gubernamentales que conforman este país. Aunque sólo resulta en una distinción conceptual porque en la práctica los distintos planes y programas se desarrollan como si fueran un mismo pueblo. Cada uno de estos dos pueblos indígenas habla emberá y wounaan, lenguas que, a su vez, proceden de la familia lingüística Chocó Torres de Araúz, 1970c. En la lengua emberá entre Panamá y Colombia, principalmente la ubicación geográfica de su población hablante, “ha sido determinante para la diferenciación y conformación de cinco dialectos o grupos regionales emberá” Vargas, 1993: 35. En tanto, el wounaan parece no presentar variación dialectal alguna Torres de Araúz, 1970c. La antropóloga Reina Torres de Araúz consideró que “las opiniones de distintos especialistas indican que la familia lingüística Chocó es de filiación Karib, explicándose la influencia chibcha existente por el contacto que los chocóes tuvieron en su movimiento expansivo, con pueblos de ese tronco lingüístico” ibidem: 14. Básicamente, el principal aspecto de diferenciación cultural entre emberá y wounaan es su lenguaje, conjuntamente con sus tradiciones orales sobre sus orígenes y sobre sus distintas interacciones en el pasado. Aunado a ello, el apego identitario que cada uno de ellos tiene a su pueblo, siendo los wounaan un grupo más cohesivo y “celoso” frente a los propios emberá.

1. Breve discusión histórica: origen y procedencia