110
La baja densidad de población actual explica en parte por qué cerca del 45 de la región está bajo algún
tipo de protección formal del Estado, mientras que el 5 ha sido titulado a comunidades nativas. Sin
embargo, la creación de los Parques Nacionales Manú y Bahuaja Sonene ha creado una serie de conflictos
con derechos ancestrales Recuadro 24. Los Machiguenga que habitan dentro del P.N. Manu están
protegidos de la invasión de colonos, madereros y buscadores de oro, pero debido a las normas
del parque solo se les permite la permanencia si mantienen sus modos de subsistencia tradicionales,
entre otros no pueden usar armas de fuego o llevar a cabo actividades para producir alimentos para la
venta
323
lo cual es una fuente de acumulación de conflictos sociales y culturales permanente.
5.2.1 cAusAs dE lA dEforEstAcIón
Entre las regiones amazónicas, Madre de Dios contiene uno de los bloques más grandes de bosques
primarios de la Amazonía occidental, que incluye los Parques Nacionales de Manu y Alto Purús, así
como reservas territoriales a favor de pueblos en aislamiento que las rodean.
Sin embargo también contiene la minería, que no sólo deforesta en el sentido de retirar la cobertura
vegetal, sino que retira además suelo y varios metros del material parental además de modificar
los patrones de drenaje. En otras palabras, se trata de la destrucción permanente del bosque y de
una disminución drástica de las posibilidades de recuperación de los bosques que se da con otros usos
menos destructivos.
Para 2008 se reportó que 170 368 ha aprox. el 2 del área total de la región se encuentran deforestadas
con una combinación de actividades agrícolas, pecuarias, mineras, etc.
324
. Tomando en cuenta solamente la deforestación causada por la minería
ilegal que para 2013 se estimaba en 6 145 ha año
325
, es de esperar que la cifra total deforestada actualmente sobrepase las 200 000 ha.
Agricultura y ganadería
La mayor causa de la deforestación en Madre de Dios ha sido la agriculturaganadería asociada a la
carretera que desde 1963 llega a Puerto Maldonado y que a partir de 1978 conecta Puerto Maldonado
con Iñapari en la frontera con Brasil Mapas 2 y 6. Durante mucho tiempo la carretera era en esencia
una carretera estacional, fácilmente transitable
323 Shepard, 2003 324 IIAP, 2008
325 Asner et al., 2013
sólo durante la época seca. Para su plan de 1998, el Consejo Transitorio de Administración Regional
CTAR Madre de Dios justificaba la pavimentación de la carretera con la posibilidad de ampliar la
frontera agrícola en 400 000 hectáreas, lo que permitiría vender 4 millones de toneladas anuales de
productos agrícolas y contribuir con 760 millones de USD al PBI
326
. La carretera se terminó de pavimentar en 2010. No ha ocurrido todavía un aumento
significativo de la producción agrícola, ni de la deforestación por agricultura como se temía, pero
sí por la minería. Falta evaluar todavía los impactos acumulativos adicionales, al ampliarse esta carretera
y establecer una comunicación terrestre de transporte pesado y rápido de 14 horas entre dos potentes
centros urbanos como son Río Branco capital de Acre en el Brasil y el Cusco, pasando por Puerto
Maldonado.
La Dirección Regional de Agricultura
327
registró para 2013 cerca de 55 000 cabezas de ganado vacuno y
10 000 ha sembradas con los principales cultivos, siendo los más importantes el maíz amarillo, el
arroz, la yuca y el plátano. Sin embargo se estima que la superficie cultivada en toda la región es de
aproximadamente 44 000 ha
328
. Según algunos estudios, en Madre de Dios la
agricultura permite un rápido restablecimiento de la cobertura vegetal, es decir bosques secundarios,
mientras que en el caso de la ganadería la deforestación es más permanente. Esto es debido
a la pobreza del suelo y a un contexto en el que los agricultores no tienen acceso a fertilizantes y
herbicidas, lo que desemboca en el abandono de los campos de cultivos anuales al cabo de dos o
tres años y el consiguiente rebrote del bosque. En cambio, los pastizales se utilizan durante muchos
años, e incluso si se abandonaran tardan más tiempo en rebrotar como bosques secundarios. En todos
los casos, la distancia a las carreteras va asociada de forma positiva con una mayor superficie de bosque
maduro
329
. Los resultados de la teledetección y el análisis
histórico de la deforestación en Madre de Dios indican tasas de deforestación más elevadas durante
el período 1986–1996, que probablemente puedan atribuirse a un aumento en la actividad agrícola
comercial resultado del crédito agrario concedido por el Banco Agrario y la creación de la Empresa
de Comercialización del Arroz, S.A. ECASA que compraba arroz y maíz. El posterior rebrote de los
bosques en la década de los 90 tiene que ver casi
326 Naughton Treves, 2004 327 http:www.agriculturamadrededios.gob.pe
328 IIAP, 2008 329 Zambrano et al., 2010
111
seguro con el cierre de ECASA y del Banco Agrario en 1991
330
. De confirmarse, asistimos a una paradoja clave: relación proporcional entre deforestación y
promoción estatal agraria, suben o bajan al mismo tiempo; y hace parte de los temas “invisibles” en este
debate nacional.
Como signo de que por lo menos el discurso está cambiando, las estrategias agrícolas plasmadas
en el Plan del Gobierno Regional para el sector agrario 2008-2015
331
priorizan la mejora de la productividad, la formalización de los predios y la
articulación de cadenas productivas, no mencionan la ampliación de la frontera agrícola como uno de
los objetivos, y sí proponen la reforestación de 11 000 hectáreas.
minería
Hasta antes de 2000, la mayor parte de las 146 000 ha deforestadas en Madre de Dios correspondían
a la agricultura asociada a las carreteras, ya que con excepción de Huepetuhe la minería aurífera se
realizaba sobre los lechos de los ríos. Sin embargo a partir de 2004 el precio del oro comenzó a subir
significativamente y con ello la modalidad de extracción de oro, generalizándose los métodos que
incluyen la remoción de masa boscosa de las terrazas de los ríos principales. La reciente finalización de
la pavimentación de la Carretera Interoceánica ha reducido drásticamente el tiempo de desplazamiento
de zonas clave para los trabajadores inmigrantes como Cusco y Puno de días a horas. Esto,
combinado con el espectacular aumento de los
330 Ibíd. 331 Plan estratégico regional del sector agrario Madre de Dios 2008-
2015
precios del oro, ha provocado un crecimiento de trabajadores inmigrantes. En 2011, las estimaciones
del Gobierno elevaban a 50 000 la cifra de mineros a pequeña escala
332
. Estos cambios radicales han tenido consecuencias
devastadoras para los pueblos indígenas de Madre de Dios.
“En el sector setapo la zona que ha quedado expuesta es todo roca. nada puede crecer
excepto lianas y arbustos pequeños. Incluso en las comunidades en las que no hay actividad
minera se dan muchísimos casos de intoxicación por mercurio, lo que demuestra hasta qué punto
ha penetrado en la cadena alimentaria.” Líder indígena, Madre de Dios
Actualmente en Madre de Dios la deforestación causada por la pequeña minería es mayor que la de
todas las otras causas juntas
333
. Para 2013 estimaban que en total en Madre de Dios la minería había
deforestado más de 50 000 hectáreas, con una tasa actual de 6 145 haaño
334
. Una gran parte de esta deforestación se realiza sobre
las terrazas aluviales, que son consideradas las áreas de mayor productividad biológica, donde se pueden
encontrar los mejores suelos para la agricultura y que desde siempre han sido uno de los hábitats más
presionados por la población humana.
Un dirigente de COHARIYMA afirma que “por
donde pasa la minería nada puede crecer, todo es piedra, solo quedan hierbas y pequeños arbustos”.
Asimismo, si se ejecutaran todos los derechos mineros ya otorgados, la deforestación afectaría
a unas 400 000 hectáreas
335
justamente de los ecosistemas boscosos más escasos: los bosques de
terrazas que con sus servicios ecosistémicos pesca, fauna silvestre, productos forestales maderables y no
maderables, regulación del clima, etc. sostienen a una buena parte de su población.
Se realizó un análisis del impacto de la minería y otras actividades humanas sobre los aguajales y
cochas del Bajo Madre de Dios y sus principales afluentes, a partir del río Colorado hasta la frontera
con Bolivia. Se analizaron 2521 aguajales que ocupan una superficie de 174 065 ha y 246 cochas que cubren
una superficie de 10 642 ha, utilizándose imágenes Landsat desde 1986 a 2013. El estudio concluye
que 116 577 ha 67 de aguajales estudiados han
332 Verite, 2013 333 Asner et al., 2010 y Asner et al., 2013
334 Asner et al., 2013 335 Brack et al., 2011
Imagen 25: vista aérea de zona deforestada por la
minería en madre de dios.
Fuente: Terra PerúMINAM
112
sido impactadas de alguna manera por la minería aurífera
336
. Tal vez lo más preocupante es que los impactos de
la minería se concentran donde habitan los stocks pesqueros que aún hoy son la fuente principal de
proteína de las poblaciones indígenas y rurales en general, lo que por un lado reduce la pesca y por
otro lleva a la contaminación del ambiente con las diferentes formas de mercurio que resultan de las
rústicas prácticas para obtener el oro.
Se señala que el contenido de mercurio en diferentes tejidos humanos depende de la cantidad de pescado
consumido, del sitio donde vive y del sexo de la persona. El contenido es mayor en zonas mineras
que en Puerto Maldonado. La proporción de los habitantes con concentraciones mercurio por encima
de 16 microgramog en la zona minera es de un 11 , comparado con un 5 en las ciudades. Asimismo,
los hombres tienen una mayor exposición que las mujeres
337
. En 2012 se descubrió que las tres cuartas partes de los adultos de Madre de Dios tenían niveles
336 Janovec et al., 2013 337 Ashe 2012
de mercurio que sobrepasaban un 300 el nivel considerado peligroso
338
. Otro estudio realizado indica que una persona de 60
kg de peso que en promedio consuma dos raciones de 300 g de mota punteada a la semana estaría
consumiendo 11,3 μg de Me-Hg por semana; eso es 7,06 veces más que el límite permisible recomendado
por la OMS Organización Mundial de la Salud
339
. Este consumo de pescado es muy común en la
población indígena asentada a lo largo de los ríos principales de Madre de Dios.
Como ya se ha señalado sección 2.3 la mayor parte de esta minería es ilegal. “En 2009, Madre
de Dios tenía el mayor número de permisos no aprobados para la explotación minera de cualquier
departamento del país. Para el año 2011, después de la aplicación de la ley peruana para combatir la
338 Verite, 2013: 44 339 Fernández y González, 2009
mapa 9: Propuesta de carretera entre Iñapari y
Puerto Esperanza.
113
recuadro 34: minería y comunidades indígenas en madre de dios
Las comunidades indígenas y la FENAMAD atravesaron un proceso complejo, en el cual la función del Estado fue perjudicial y motivó variaciones en el camino. Los años 70 y 80 fueron
de rechazo indígena frontal a dicha minería, la cual sin embargo era alentada por el Estado a través del otorgamiento de “concesiones mineras” a terceros, normalmente migrantes andinos,
que les daban el supuesto “derecho” de invadir territorios indígenas, ya que el título comunal no otorga derechos sobre el subsuelo o las riberas auríferas. En ese enfrentamiento en defensa de
la Amazonía se tuvo que afrontar la represión y persecución estatal a la FENAMAD. La resistencia indígena fue derrotada, aunque la tensión fortaleció la identidad y estructura organizativa de la
FENAMAD.
Sin embargo a fines de los años 90 el aluvión minero fue incontenible y las comunidades se vieron rodeadas, arrinconadas y violentadas por una alianza entre Estado, ministerios, policías,
migrantes, mineros y grandes empresas compradoras de oro.
Un dirigente de FENAMAD recuerda que:
“Entre 1989 y 1999 ocurrieron muchos encuentros violentos entre las comunidades nativas y mineros en la zona de amortiguamiento de la futura reserva comunal Amarakaeri propuesta
en 1995 y creada en 2006. Había peleas con machetes y escopetas con heridos en ambas partes. se negoció una tregua cuando los mineros ofrecieron algunos beneficios a las
comunidades, y hasta ahora los mineros dicen que fueron invitados por las comunidades y al área le dicen zona minera de invitados.”
Sin el respaldo estatal para enfrentar la violencia no quedó otra alternativa
I
para varias comunidades que adoptar ellas mismas la extracción aurífera, gestionando sus propias
“concesiones mineras indígenas” antes que terceros lo hagan invadiéndolas. Esto detenía un peligro, pero abría otros, como la expansión de la deforestación y degradación desde el interior
del mundo indígena. Una nueva respuesta fue la de impulsar una propuesta de autorregulación, un “programa alternativo indígena: ‘régimen Especial’ de la Actividad minera, en comunidades
nativas”
II
, en la cual se zonificaba la comunidad y sus riberas, delimitando el área de extracción y fijando límites máximos del territorio comunal. Obtener la concesión legal implica elaborar y
recibir aprobación estatal de un estudio de impacto ambiental y su respectivo plan de manejo. La tecnología debía ser mejorada para evitar o reducir la gravísima contaminación por mercurio,
a nivel humano, hidrográfico y de flora y fauna.
Otra vez, como en los años 70 y 80, la reacción del Estado en los años siguientes al 2000 fue de una profunda incomprensión de la complejidad amazónica e indígena. Luego de tolerar y
encubrir la gigantesca invasión minera andina en MDD, el Estado pasa a pretender “legalizarla” y por lo tanto reprimir intensamente la ilegalidad. En ese nuevo enfoque, rechaza nuevamente
la postura indígena de un plan de autorregulación minera comunitaria. Contradictoriamente, si los invasores mineros de tierras comunales se “legalizan”, quedarán con mayores derechos
y las comunidades más lejos de recuperar el control por su parte. La postura estatal de no permitir ninguna extracción en el área de comunidades indígenas, ni la informal andina ni la
formal comunitaria amazónica, sigue generando incertidumbre, ya que la supuesta pretendida “legalización” puede terminar contribuyendo a la extracción por parte de grandes empresas.
Fuentes: FENAMAD, ECA-RCA
III
y AIDESEP
IV
I Comunicaciones con dirigentes de FENAMAD y la ECA-RCA
II http:fenamad.org.pedocumentospronuncia-las-comunidades-tienen-derecho-a-trabajar-mineria.pdf
III Ejecutor de Contrato de Administración – Reserva Comunal Amarakaeri IV Entrevistas hechas con los dirigentes como parte de la elaboración del “Informe sobre Redd+ Indígena en Madre de Dios”,
2014, Consultoría Proyecto COICA-BID.
114
minería ilegal, el Viceministro de Minas del Perú todavía estimaba que el 97 por ciento de la minería
en Madre de Dios era ilegal”
340
.
Extracción forestal
Luego del colapso del caucho a comienzos del siglo XX, en Madre de Dios hubo una retracción de la
migración y del movimiento comercial que duró hasta que se construyeron las carreteras a Shintuya y
Puerto Maldonado. Hubo un primer auge maderero en el año 1979, cuando la producción llegó a 6,2
millones de pies Tablares pt de cedro y caoba
341
, maderas que crecían en densidades bajas, sobre todo
en la provincia de Tahuamanu. Luego de un período de producción relativamente
baja en los años 80, el Estado fomentó la extracción maderera con una serie de normas, como por
ejemplo la capacidad de autorizar contratos forestales de hasta 1000 hectáreas por parte de las
agencias agrarias. La construcción de la carretera de Puerto Maldonado a Iñapari permitió el ingreso
de madereros a nuevas áreas, incluidos bosques habitados por pueblos indígenas en aislamiento
342
. La producción alcanzó 26,8 millones de pt en 1999, lo
que representaba el 7 de la producción maderera nacional, pero debido a su naturaleza informal e
ilegal no se tradujo en un beneficio económico para la región
343
. La historia reciente de la extracción forestal en
Madre de Dios refleja la dinámica general de la actividad en el Perú, con corrupción, extracción
ilegal e invasión de tierras indígenas, a veces con la anuencia de malos dirigentes. Por ejemplo a fines de
los años 90 una compañía extranjera, Newman, abrió una carretera clandestina de más de 180 km entre los
ríos Acre y Tahuamanu
344
. El efecto de la extensiva extracción forestal sobre
las poblaciones de indígenas en aislamiento ha sido grave.
“la actual presencia masiva de madereros en territorios de indígenas aislados ha tornado lo
que antes eran sorpresivos avistamientos en encuentros violentos, dejando el saldo de heridos,
desaparecidos y probablemente muertos … otro de los problemas causados por la presencia de los
madereros en territorios habitados por pueblos indígenas aislados son las llamadas dislocaciones
340 Verite 2013:37 341 Huertas, 2003
342 Ibíd. 343 Ibíd.
344 Ibíd.
territoriales o alteraciones de las rutas de desplazamiento de éstos últimos.”
345
Estas dislocaciones han trascendido fronteras, causando grave impacto en los pueblos Asháninka,
Manchineri, Yaminahua y Cashinahua del vecino Estado de Acre en Brasil
346
. Luego de la nueva ley forestal se inició el proceso de
concesiones en 2002. Algunas de estas concesiones pueden cubrir entre 5000 y 40 000 hectáreas por
un período de 40 años renovables. En Madre de Dios fue un proceso desordenado en el que se
establecieron una serie de empresas de mayor o menor formalidad. Según el OSINFOR existen 82
concesiones que cubren un área de 1 248 037 ha. Sin embargo, recientemente 9 concesiones fueron
declaradas caducas por el OSINFOR y 2 están con procedimientos administrativos iniciados.
En Madre de Dios también existen 983 concesiones para la extracción de castaña
347
que cubren un área de 864 000 hectáreas
348
, así como 24 concesiones para la extracción de shiringa con un área de 161 000
hectáreas. Un cambio en la normativa permite la extracción forestal en concesiones de extracción de
castaña y, según informes, en Madre de Dios se está extrayendo más madera de estas concesiones que de
las concesiones forestales propiamente dichas
349
. En la mayoría de las concesiones castañeras se reportaron
volúmenes de 5 m
3
ha, mientras que la gran mayoría de los contratos de concesiones de madera reportó
volúmenes mucho menores, con lo que en efecto se desvirtúa la supuesta complementariedad de la
extracción de madera y de castaña
350
. Algunas comunidades indígenas extraen castaña de
manera formal, por ejemplo, existe la Asociación Forestal Indígena de Madre de Dios AFIMAD
351
, que agrupa 7 comunidades para promover la
actividad de extracción y comercialización de la castaña y que produce unas 430 toneladas al año
con el involucramiento de 120 familias, habiendo obtenido recientemente el certificado de comercio
justo
352
.
345 Ibíd: 358 346 Ibíd.
347 Bertholletia excelsa 348 http:dgffs.minag.gob.pepdfconcesionesconces_fores_otros_
productos.pdf 349 Cossio et al., 2011
350 Ibíd. 351 AFIMAD es una organización técnico económica, basada en
comunidades asociadas en FENAMAD y que está integrada en el marco organizativo regional de dicha federación
352 http:peru.panda.org?217663 certificacionorganicaydecomerciojustofloafimad
115
5.2.2 rEsPuEstA dEl gobIErno rEgIonAl