Indicadores no monetarios: consumo de bienes y servicios

RECUADRO 13. Indicadores no monetarios: consumo de bienes y servicios

El carácter multidimensional de la pobreza, tal como calefacción, materiales empleados en la construc- se ha descrito hasta aquí, requiere la medición de

ción del edificio, condiciones de salubridad, abaste- muchas variables que participan en la definición del

cimiento de agua, disponibilidad de agua potable), bienestar. A este respecto, los ingresos y el consumo

educación (alfabetización, asistencia a la escuela, no representan un indicador plenamente satisfactorio

acceso a escuelas), vestimenta, medio ambiente, trans- del bienestar. Esta deficiencia es particularmente

porte, etc. 2 En este caso, la extensión de la pobreza manifiesta en el caso de la pobreza urbana, en la que

se puede medir directamente con un índice que iden- la satisfacción de las necesidades puede depender del

tifique un nivel mínimo de satisfacción de las necesi- acceso a los servicios (Banco Mundial, 2004), y los

dades básicas que forman parte de la definición del patrones de gasto reflejan –con respecto a las zonas

bienestar doméstico. 3

rurales– una porción más elevada del consumo esen- cial de bienes y servicios (como transporte, vivienda,

servicios básicos y salud) en relación con el consumo 1 Mitlin (2004) pone al descubierto que 22 de los 23

de alimentos. documentos investigados sobre estrategias para reducir la

pobreza aplican mediciones ingresos/gastos, mientras que La preferencia general por las mediciones econó-

sólo cuatro toman también en consideración mediciones micas del bienestar antes que por las no económicas

relativas a necesidades básicas. Cabe destacar, de todos se debe seguramente al hecho que estas últimas, a

modos, que la multidimensionalidad incrementa la dificultad pesar de estar caracterizadas como indicadores más para establecer comparaciones interpersonales, las cuales resultan necesarias para las clasificaciones del bienestar;

detallados del bienestar, resultan más complejas y véanse Duclos, Sahn y Younger (2001), y Bourguignon y costosas de recopilar. 1 No obstante, un acercamiento

Chakravarty (2002) para los criterios de comparación con más integral a la evaluación del bienestar debería

múltiples indicadores del bienestar. Además, Lanjouw y efectuarse mediante el empleo de indicadores no Lanjouw (1997) apuntan una posible compensación entre la exhaustividad de las mediciones del bienestar y su capacidad

monetarios, expresados en términos del consumo de de comparación. Bibi (2005) y Thorbecke (2005) presentan un conjunto de bienes y servicios como el siguiente:

revisiones recientes de los planteos sobre la medición de la alimentos (por ejemplo: ingesta diaria de calorías,

pobreza desde una perspectiva multidimensional. nutrición infantil), salud (índice de masa corporal, tasa 2 Varios estudios avalan que los gastos por servicios de trans-

de infecciones, expectativa de vida, mortalidad, uso porte en las zonas urbanas pueden fácilmente representar un 15% o más de los ingresos mensuales (Mitlin, 2004).

de servicios sanitarios, número de hospitales y cen- 3 Un indicador compuesto del bienestar es el Índice de Desa-

tros sanitarios a una distancia accesible), estándares rrollo Humano (IDH), que consiste en la suma ponderada de de vivienda (espacio adecuado, aire acondicionado/

tres mediciones de privación: ingresos, salud y educación.

54 POBREZA EN ÁREAS CENTRALES URBANAS