La grabación de Please, please me

8.2.1 La grabación de Please, please me

  En la sesión del 11 de febrero de 1962 se grabaron diez canciones para el eventual disco de larga duración que, como hemos visto, era el paso natural después de alcanzar cierto éxito con la venta de singles: cuatro que eran composiciones propias del grupo y las seis que eran números ajenos pero incorporados al directo del grupo. Mientras que las canciones propias requirieron varias tomas para poder captarlas apropiadamente, los temas ajenos se hicieron en pocas tomas, o simplemente en una, como fue el caso de ―Boys‖, o dos, como ―Twist and Shout‖. Hay entonces una economía del tiempo y del esfuerzo. 244

  A diferencia de las prácticas habituales de la industria discográfica especializada

  en el mercado pop de finales de los 50 y principios de los 60 –en las que los AR men o productores discográficos señalaban las obras que los músicos debían grabar, con todo

  244 Mark Lewisohn señala que para dicho 11 de febrero, Martin había reservado dos sesiones del Estudio 2 de EMI en Abbey Road. Una primera sesión de 10 de la mañana a 1 del mediodía, y la segunda, de dos

  y media de la tarde hasta las cinco y media. Esta segunda sesión se extendió una media hora más, y finalmente se agregó una tercera sesión, de siete y media a once menos cuarto de la noche (Lewisohn, 2010:99). Un total de 585 minutos que rindieron de la siguiente manera: 1ª Sesión (10.00am-1.00pm): 10 tomas de ―There‘a a place‖ (McCartney-Lennon), 9 tomas de ―I saw her standing there‖ (McCartney- Lennon). 2ª Sesión (2.30-6.00pm): 7 tomas de ―A taste of honey‖ (Scott-Marlow), 8 tomas de ―Do you want to know a secret‖ (McCartney-Lennon), 3 tomas más de ―There‘a a place‖ (McCartney-Lennon), 3 tomas más de ―I saw her standing there‖ (McCartney-Lennon), 11 tomas de ―Misery‖ (McCartney- Lennon). 3ª Sesión (7.30-10.45pm): 13 tomas de ―Hold me tight‖ (McCartney-Lennon), 3 tomas de ―Anna‖ (Alexander), 1 toma de ―Boys‖ (Dixon-Farrell), 4 tomas de ―Chains‖ (Goffin-King), 3 tomas de ―Baby it‘s you‖ (David-Williams-Bacharach), 2 tomas de ―Twist and shout‖ (Medley-Russell).

  el complejo proceso de composición, edición y selección del material que esto conllevaba-, los Beatles no sólo presentaron su propia obras (ocho canciones, algo bastante improbable en rock‘n‘roll blanco de aquel entonces, salvo pocas excepciones, como Buddy Holly en Estados Unidos, o Billy Fury en el Reino Unido), sino que las canciones grabadas que no eran suyas tampoco eran material procedente de Denmark Street; se trataba en cambio de canciones que gustaban a los Beatles y que pertenecían al lado menos conocido del catálogo de sus artistas contemporáneos favoritos.

  Hoy puede parecer increíble no sólo la velocidad con que se grabó Please, please me, sino la tecnología utilizada para lograr tal fin. Se usó una tecnología multipista incluso algo atrasada para su momento. George Martin (1979) comenta que cuando se hace cargo de Parlophone en los años cincuenta, llevaban pocos años usando

  el formato de disco de 12 pulgadas 245 –el long play-, lo que puede ayudarnos a entender

  de forma general tanto la predisposición de EMI y Parlophone (esta última como subsidiaria de la primera) hacia la inversión en tecnologías de producción discográfica

  como la predisposición a emplearla para grabar rock‘n‘roll. 246 También es significativo, dentro de esta sesión apurada, el que no se reparara en detalles tales como el resfriado

  que castigaba a John Lennon en dicha fecha invernal, y que no se pospusiera entonces la sesión hasta que se encontrase en mejor condición física su garganta. 247

  Cfr. la guerra de los formatos, comentada en el apartado 7.4 La industria musical tras la Gran Depresión o el escenario del rock’n’roll (el disco de 12 pulgadas, de finales de los años 40, fue una creación de Columbia).

  Según Martin (1979), a principios de 1963, aunque ya existían en los Estados Unidos máquinas grabadoras de cuatro pistas, los estudios Abbey Road de EMI contaban con un sistema de dos pistas. Jerry Zolten (2009:39), por su parte, señala que EMI sí tenía la capacidad para trabajar con cuatro pistas, pero consideró a los Beatles, firmados por su subsidiario menor Parlophone, no dignos (―lowbrow‖) de acceso

  a dicha tecnología. En todo caso, trabajar con dos pistas daba la posibilidad de grabar las canciones en una toma, y usar la pista restante para agregar algún detalle. O, arriesgándose a perder calidad sonora, e inspirados en las técnicas desarrolladas por Les Paul (cfr Waksman, 1999:36-74), se anticipaba la tecnología multipistas sencillamente usando dos máquinas grabadoras: en una primera se grababa una toma de la canción en la cantidad disponible de canales o pistas (en el caso de las primeras grabaciones de los Beatles en Abbey Road, reiteramos, dos canales), y luego volcando en la segunda grabadora esta cinta master de la primera más las grabaciones u overdubbings eventuales.

  247 Aunque si atendemos al calendario de los Beatles en aquel mes de febrero de 1963, veremos que el volumen de trabajo es bastante fuerte: de los 28 días que tuvo febrero ese año, los Beatles descansaron

  Este apuro u organización jerarquizada se puede oír entonces en el disco y en el orden de grabación del mismo. Si volvemos al 11 de febrero y vemos el orden de las sesiones, y si nos fijamos en las canciones que Lennon canta en la última sesión de la tarde-noche, ―Anna‖, ―Baby it‘s you‖ y ―Twist and shout‖, oiremos con facilidad la voz tomada por el resfrío y cómo en ―Twist and shout‖, que sería la última del disco, la voz

  de Lennon termina por romperse.

  Este hecho es de suma trascendencia. ―Twist and shout‖ será de las canciones más conocidas de los Beatles, 248 y una canción que desde finales de 1962 y hasta la gira

  americana de 1965 los Beatles incluirán en casi todos sus conciertos. Y la ejecución de Lennon será de las más importantes en la historia vocal del rock; será el carácter desgarrador de la voz rompiéndose en cada verso el que marque un nuevo hito vocal en la historia del rock –en tanto que música blanca-, algo que no ocurría desde los primeros sencillos de Elvis Presley. (Volveremos a esta canción en el punto 10.2.4)